7 de febrero de 2025

Hummus de remolacha

El antiguo Egipto, además de ser el origen de un importante destino turístico a nivel mundial, fue, en su momento una de las cunas de la civilización, una tierra marcada sobre todo, por la presencial y función del rio Nilo tanto como elemento de transporte como de fertilización de sus orillas, alejando un poco al desierto del Sahara.

 

Desde hace muchos años, uno de los alimentos más importante de la zona de Egipto son las legumbres, en especial los garbanzos pudiéndolos encontrar aún hoy en día, en platos tan célebres como el falafel, el Koshari y sobre todo, el hummus. Este último se ha extendido por todo el mundo, aunque muy especialmente por Oriente Medio (Líbano, Israel, Palestina, Chipre, Turquía, etc.)

 

Hoy, en este rincón os queremos contar una versión un poco especial del hummus, un plato tan sencillo como sabroso y a la vez, sano. Esta receta que os contaremos, los garbanzos comparten protagonismo con un vegetal también con mucha historia, la remolacha.

 

Prepararos para disfrutar de esta crema untable con nuestra receta de “Hummus de remolacha”, en esta ocasión, para cuatro raciones, para la cual necesitaremos los siguientes ingredientes:

 

1 remolacha cocida (de más o menos 250 g)

200 g de garbanzos en conserva

1 diente de ajo

1 limón

2 cucharadas de tahini (pasta de sésamo)

Aceite de oliva virgen extra

Sal

 

Lo primero que haremos será limpiar y escurrir los garbanzos para quitarle completamente el jugo de conservación que llevan. Una vez hecho los pondremos en el vaso de la batidora (o del robot de cocina, a vuestra elección), al cual añadiremos la remolacha cortada a trozos pequeños.

 

Una vez lo tengamos, pelaremos el ajo y lo cortaremos a trozos, rallaremos el limón (sólo la parte amarilla ya que la blanca amarga bastante) y lo exprimiremos. Añadiremos al vaso de la batidora el ajo, el zumo de limón y la ralladura de este.

 

Una vez lo tengamos, accionaremos la batidora al máximo y batiremos todos los ingredientes hasta conseguir una crema uniforme. Cuando la tengamos, añadiremos las cucharadas de tahini y volveremos a batir, mientras poco a poco vamos añadiendo tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra. El objetivo es conseguir una crema untosa, la cual probaremos y corregiremos de sal si lo estimamos oportuno.

 

Finalmente, pondremos el hummus de remolacha en cuencos individuales, tal que así:

 

Una ración de hummus de remolacha
Una ración de hummus de remolacha

 

Para acompañar o untar, tenemos varias opciones, usar pan pitta (una opción muy de Oriente Medio) o, unas buenas patatas fritas de bolsa cocinadas en aceite de oliva (esta opción es más divertida y occidental).

 

¡ Buen provecho ¡