28 de octubre de 2020

Tarta crujiente de mango

Estamos en pleno otoño, un otoño más raro de lo normal (maldito COVID), donde parece que disfrutaremos muy poco de las bondades de nuestros bosques, de los aromas y sabores de nuestras setas. Por eso, en este pequeño rincón hemos querido romper la lanza y buscar una receta que nos permita disfrutar de la cocina y porque no decirlo, de la vida.
 
Para ello, hemos echado mano de una fruta que, en otoño está en plena temporada (como mínimo en todo el arco mediterráneo), el mango. La fruta del mango, aunque es original de sureste asiático, actualmente se ha extendido a lo largo y ancho de las zonas con clima tropical (México, Indonesia, Brasil, Florida, etc.) y en Europa, en España.
 
Disfrutar de esta dulce y deliciosa fruta, es realmente fácil, como ya vimos con nuestra receta de “Vaso de Mango, yogur y chia”, y hoy, os lo volveremos a demostrar con una deliciosa “Tarta crujiente de mango”.
 
Los ingredientes que necesitaremos para preparar esta deliciosa “Tarta crujiente de mango” serán:
 
5 o 6 láminas de pasta brick (o filo)
1 mango maduro
1 huevo
100 g de mantequilla/margarina en pomada (o derretida)
60 g de azúcar
80 g de almendra molida
1 cucharada de maicena
1 cucharada de miel (o sirope de agave o de arce)
 
Como esta “tarta crujiente de mango” es relativamente rápida de preparar, lo primero que haremos será poner a calentar el horno a unos 200 grados (con calor inferior y superior).
 
Mientras el horno calienta, con un cuchillo muy afilado (o si tenéis mandolina, con ella), procederemos a cortar a láminas muy finas, una vez pelado, el mango. Cuando lo tengamos, reservaremos.
 
A continuación, prepararemos una crema, para ello mezclaremos con unas varillas, unos 60 gramos de mantequilla con el azúcar. Una vez integrados estos ingredientes, añadiremos unos 60 gramos de polvo de almendra, la cucharada de maicena y el huevo, y de nuevo volveremos a mezclar bien con las varillas hasta obtener una masa uniforme.
 
Hecho esto, procederemos a montar la base de la tarta, para ello, en una bandeja de horno colocaremos una lámina de pasta brick, la pintaremos con mantequilla y espolvorearemos con azúcar. Repetiremos esta operación para cada una de las láminas de pasta filo que tengamos, colocando cada hoja sobre la anterior.
 
Finalmente, repartiremos la crema que tenemos reservada sobre la última hoja de pasta filo (sin llegar al extremo de la misma), una vez hecho, iremos colocando las láminas de mango como si fueran una flor. Una vez lo hayamos hecho, meteremos la bandeja en el horno a media altura y dejaremos que se cocine unos 20/25 minutos.
 
Al sacarlo del horno, pintaremos con la miel / sirope de agave / sirope de arce y espolvorearemos con la almendra que nos quede.

Tarta crujiente de mango
Tarta crujiente de mango

  

¿Os apetece? Pues es una tarta que está realmente deliciosa, sobre todo si el mango es de calidad.
 
¡Buen provecho!

 

 

8 de octubre de 2020

Restaurante Oh! Taku - Bilbao

Restaurante Oh! Taku - Bilbao
Desde hace unos años, ha aparecido en nuestro país una especie de moda gastronómica, al igual que en su momento lo fueron los restaurantes italianos, los mexicanos e incluso, los erróneamente dichos, restaurantes chinos, os estamos hablando de los restaurantes japoneses.
 
Como en el caso del resto de gastronomías que os hemos enumerado antes, en el equipo no creemos que se trata de una moda, sino que la gastronomía japonesa ya llegado a nuestras calles para quedarse en ellas. Con todo, nos gustaría distinguir entre los varios tipos de restaurantes que nos encontramos ya que, al igual que para otras gastronomías, de japoneses tienen muy poco.
 
Para empezar, desconfiad al igual que hacéis de los restaurantes italianos que sólo ofrecen pizza, de aquellos restaurantes japoneses que sólo ofrecen sushi o que, misteriosamente están al lado de un restaurante chino (¿no será el mismo aprovechando la moda del sushi?). También desconfiad de aquellos restaurantes japoneses “sucios” o que se dedican solo al “take away”.
 
Visto esto comentaros que, en nuestra ciudad, Vitoria-Gasteiz, donde como os hemos dicho a veces, hay una gran gastronomía, pero una variedad muy aburrida de la misma (vaya, que sota-caballo-rey en un alto porcentaje), también han llegado los restaurantes japoneses, bueno o que imitan la cocina japonesa.
 
Con todo, hoy nos vamos a trasladar a otra ciudad, a Bilbao, serán solo unos 60 kilómetros, pero allí, una ciudad mucho más global que Vitoria-Gasteiz, encontraremos el restaurante del que os queremos hablar, el restaurante “Oh! Taku”.
 
El restaurante “Oh! Taku” es un restaurante japonés perteneciente al grupo de restauración Kuma (tranquilos, no es una franquicia), gestores de uno de los mejores restaurantes de Bilbao.
 
A escasos metros del “Restaurante Casa Leotta” que os hablamos hace unos meses, nos encontramos con un local que, externamente poco recuerda a un restaurante, solo una ventana abierta a una cocina y un pequeño cartel que reza “OH! TAKU”.
 
Ni que deciros que, en los tiempos que nos está tocando vivir, para poder disfrutar el “Oh! Taku” es totalmente imprescindible hacer reserva y acudir puntualmente, aunque sinceramente, podéis ir tranquilamente porque cumplen con las reglas “anti COVID-19” al pie de la letra.
 
Antes que nada, deciros que el restaurante “Oh! Taku” tiene una especialidad, el ramen. Que ¿qué es el ramen? Pues el ramen es una sopa con mucho fundamento, repleta de una gran cantidad de fideos de trigo y un sinfín de sacramentos (cerdo, setas, algas… etc.).
 
En esta ocasión el equipo se compuso de tres personas y pedimos lo siguiente:
 
“Takoyakis de pulpo”.  Podríamos definirlos como unas croquetas o buñuelos de pulpo japonesas. Están realmente buenas. Una delicia para el paladar. Totalmente imperdibles.
 
Takoyakis de pulpo
Cuatro deliciosos "Takoyakis de pulpo"

 
 
“Ramen Koji Miso”. Con una base de sopa miso un poco fermentada y una textura más espesa de lo esperada este ramen constituyo una auténtica sorpresa por sabor y presentación. Quizá el mejor de los tres que probamos.
 
“Ramen Tantanmen”.  Este ramen parte de una base de sopa potenciada por un chile picante y carne picada de cerdo, también picante. Como resultado, un ramen complicado ya que, a medida que vas comiendo el picante te satura. En definitiva, sólo para amantes del picante.
 
“Ramen Tori Paitan”. Muy parecido al “Koji Miso” en su base, pero mucho más suave de sabor que ese. Realmente, un buen ramen para descubrir el mundo de las sopas japonesas.
 
Tres ramen del "Oh! Taku" de Bilbao
Arriba, el "Tori Paitan", abajo el "Koji Miso" y a la derecha el "Tantanmen"

 
 
 
Para acabar, que mejor que con unos dulces japoneses caseros, en este caso, acabamos con unos mochis (una especie de bolas de varios sabores recubiertas por una pasta de arroz), que estaban, de vicio.
 
 
Un Mochi de Tiramisú
Un Mochi de Tiramisú, delicioso y original final de fiesta

 
 
 
Al final, lo que os hemos contado, más tres cervezas japonesas, hemos pagado unos 72€, o lo que viene a ser, unos 25€ por persona.
 
 
Os tenemos que asumir que nuestra experiencia el “restaurante Oh! Taku” ha sido, simplemente aceptable ya que, pese a que los entrantes y los postres nos han encantado, de los ramen, en general esperábamos un poco más, un poco más suaves (menos densos de textura y sobre todo de picante) y, un poco menos contundentes (no salimos rodando por poco).
 
La atención del personal correctísima y efectiva, y la limpieza del local, digna de reseñar sobre todo en los tiempos que corremos.
 
No os vamos a decir que nos haremos asiduos al “Oh! Taku” pero sí que os decimos que lo recomendamos y que, seguramente volveremos para probar, más platos suyos.
 
Si queréis ir, no olvidéis reservar con antelación pues su comedor es relativamente pequeño. Para ello os dejamos sus datos de contacto:

 

 

Calle Heros, 14
48009 Bilbao

 

Teléfono:   693 93 84 99