Como bien sabéis, los
miembros de este equipo tenemos, además de la gastronomía otra afición, para
nosotros, totalmente relacionada, los viajes. Por eso, cuando viajamos
intentamos descubrir y disfrutar de la gastronomía local, de sus mezclas de
sabores, de olores, etc. Para después, siempre que esté en nuestras manos
adaptar esas combinaciones a nuestros platos del día a día.
Con todo, son muchas las
ocasiones en que, desgraciadamente, ni nuestros horarios ni nuestro presupuesto
nos permite viajar físicamente. En esos casos, echamos mano de internet para
adaptar alguna receta que nos llame la atención y nos permita viajar a lugares
recónditos. No hace mucho, y a través de la receta que os presentamos hoy, nos
permitimos viajar a Tailandia, se trata de una “Albóndigas de cerdo tailandesas”.
Para hacer dos raciones
generosas (unas 12 unidades) de estas albóndigas de cerdo con aroma a Tailandia necesitaremos:
Para las albóndigas:
300 g de carne picada de
cerdo
¼ cebolla dulce
½ bote de leche de coco
1 huevo
1 cayena (o chile)
1 diente de ajo
1 lima
1 cucharada de azúcar
3 cucharadas de arroz
basmati
Jengibre
Cilantro
Sal
Para la salsa:
½ bote de leche de coco
1 cucharada de azúcar
1 cucharada de maicena
2 cucharadas de vinagre
de vino
Sal
Tantos ingredientes
asustan, ¿verdad? Pues no os preocupéis porque la receta, como todas las que os
contamos aquí, es fácil y resultona.
Lo primero que haremos
será tostar las tres cucharadas de arroz basmati. Para ello, pondremos una
sartén al fuego sin aceite. Cuando esté caliente, añadiremos el arroz y
dejaremos tostar. Cuando esté tostado, lo trituraremos bien con la ayuda de un
mortero.
En un bol lo
suficientemente grande pondremos: la carne picada, media cucharada de jengibre,
el diente de ajo picado bien fino, la cayena bien picada también, el azúcar, la
ralladura de la lima y un tercio de su zumo. Una vez hecho, mezclaremos bien
para integrar todos los ingredientes. Una vez hecho, añadiremos el huevo, la
cebolla picada, el cilantro, el arroz tostado triturado y la leche de coco,
finalmente, mezclaremos hasta conseguir una masa pastosa.
Ha llegado el momento de
poner a precalentar el horno, y lo haremos a 200 grados. Mientras calienta,
nosotros iremos preparando las albóndigas y las dispondremos sobre un papel
sulfurado (papel de horno, vaya).
Una vez el horno esté
caliente, pondremos la bandeja con las albóndigas en el horno y las
mantendremos allí unos 10/12 minutos con calor superior e inferior.
Mientras se cocinan las
prepararemos la salsa. Para ello cogeremos la leche de coco que nos ha sobrado,
le añadiremos una cayena bien picada (o chile), una cucharadita de café de
azúcar, otra de vinagre blanco y mezclaremos bien. Pondremos esta leche en un
cazo al fuego y cuando arranque a hervir, añadiremos un poco de agua con
maicena disuelta para espesar la salsa. Finalmente, apagaremos el fuego y
reservaremos.
Para montar el plato,
nosotros normalmente lo hacemos con un acompañamiento de arroz basmati y unos
gajos de lima, tal que así:
Una ración de albóndigas tailandesas con arroz basmati |
¡Buen provecho!
Un plato muy apetecible, de esos que se moja con un poco de pan, un beset
ResponderEliminarLa verdad es que es un plato que sorprende a quien lo prueba... en casa nos encanta. Muchas gracias por el comentario y por los besets, que vienen de vuelta ;)
EliminarMi hermano estuvo este verano en Tailandia y nos contó maravillas de su gastronomía. Y estas albóndigas con el aroma del coco tienen que estar buenísimas. Me encantan ese tipo de contrastes de sabores ;-)
ResponderEliminarLos contrastes de sabores son, también, una de las cosas que más nos gustan en la cocina y uno de los puntos más destacados de estas albóndigas.
EliminarSi es que el que no "viaja" es porque no quiere! Me llaman mucho la atención los ingredientes de la receta, la leche de coco...la lima...
ResponderEliminarHabrá que ser valiente y probar!
La leche de coco le da a la carne una suavidad especial y la lima, un toque de frescor y acidez que, junto la punta de guindillita es brutal!!!
Eliminar